Poema a la Vida

Vida:

Vida que engendraste mi ser con un par de células vivas y ardientes,
Vida que me protegiste dentro de aquél delicado y suave capullo,
Vida que acariciaste mi rostro con la ternura de tus manos calientes,
Vida que vigilaste mis sueños entre suspiros y palabras de arrullo.

Vida que llenaste con un soplo divino el aire de mis dos pulmones,
Vida que me colmaste de dulces besos arropado entre tus brazos,
Vida, que Dios ha creado para sentir que hay en mí nuevas ilusiones,
Vida que me ayudaste con gran paciencia a dar mis primeros pasos.

Vida que me diste alimento paciente con tus tibias y tersas manos,
Vida que secaste tranquila mis lágrimas de tristeza, dolor y coraje,
Vida que me diste para enseñar el buen camino a mis hermanos
Vida que ahogaste resignada un grito de dolor entre mi ropaje.

Vida que escuchaste mi primeras palabras de amor y de confianza,
Vida que me cuidaste entre las sábanas blancas cubiertas de seda,
Vida que me enseñaste a sobrevivir siempre con toda la esperanza,
Vida que mi palabra de fe como un eco sonoro sobre la tierra queda.

Vida que en el evangelio comprendiste cada corazón escondido,
Vida de silencioso caminar, hondo suspiro y de ahogado llanto,
Vida que ofreciste el perdón a un hombre solitario y arrepentido,
Vida que algún día dejarás grabada con mi sangre sobre el manto.

Vida de quietud galopante entre guirnaldas de sentimientos puros,
Vida de luces estrelladas como luciérnagas solitarias y gozosas,
Vida que me has dado el amor para entrar a los corazones duros,
Vida que en noches de lamentos me consuelas con perfume de rosas.

Vida que algún día te marcharás indeleble en un hondo suspiro,
Vida que hoy veo nacer en la cuna como tu bienaventurado hijo,
Vida que desde el cielo azul a la derecha de mi Padre yo me miro,
Vida que el Padre celestial en el pesebre mi vida gloriosa bendijo.

Autor: Adonisedec González de Santiago.
Diciembre 25, 2009.